miércoles, 27 de febrero de 2013



LOS TRASTORNOS DEL DESARROLLO LINGÜÍSTICO
   
      Alteraciones que afectan al habla Infantil


DISLALIA

¿Qué es la dislalia? La dislalia es la dificultad de reproducir uno o varios fonemas de la lengua sin que exista ninguna causa orgánica o neurológica que lo justifique, siendo  el aparato fonoarticulador el que se ve afectado en este trastorno.
Los síntomas que pueden provocar este trastorno son la omisión, la sustitución y la distorsión e inserción de fonemas.
Las podemos clasificar como Dislalias evolutivas, que son aquellas que aparecen en los fonemas que están desarrollándose  en esa etapa evolutiva y como Dislalias Funcionales, son alteraciones que se producen en la articulación de los fonemas que ya deberían estar adquiridos a esa edad.

*Tratamiento de la dislalia infantil
Es conveniente saber que los niños con dislalias necesitan tratamiento con un especialista que aplicará el tratamiento adecuado, con la ayuda de juegos y mucha colaboración de la familia. Y es que la dislalia es un problema que no desaparece sin la intervención de un especialista. La intervención de un logopeda o de un maestro en audición y lenguaje, cuyo objetivo es que el niño aprenda a articular los sonidos correctamente, empieza con una evaluación del nivel articulatorio del niño, y un programa basado en los siguientes pasos:

1. Estimulación de la capacidad del niño para producir sonidos, reproduciendo movimientos y posturas, experimentando con las vocales y las consonantes. Se le enseñará a comparar y diferenciar los sonidos.
2. Estimulación de la coordinación de los movimientos necesarios para la pronunciación de sonidos: ejercicios labiales y linguales. Se enseña al niño las posiciones correctas de los sonidos más difíciles.
3. Realización de ejercicios donde el niño debe producir el sonido dentro de sílabas hasta que se automatice el patrón muscular necesario para la articulación del sonido.
4. Al llegar a este punto, el niño estará preparado para empezar con las palabras completas, a través de juegos.
5. Una vez que el niño es capaz de pronunciar los sonidos difíciles, se tratará que lo realice fuera de las sesiones, es decir, en su lenguaje espontáneo y no solo en las sesiones terapéuticas.

El tratamiento consiste en ejercitar la musculatura que está interviniendo en la producción de los sonidos. La terapia se centra en juegos que facilitan la adquisición de las habilidades necesarias. Requiere implicación y participación tanto del niño como de su familia, para que el proceso pueda ser seguido y complementado por ellos en casa. Cuando la causa del trastorno viene por malformaciones físicas se requerirá un procedimiento médico para ayudar al niño a que supere las dificultades en el desarrollo de las capacidades del habla. Cuando la causa del trastorno es por retrasos fonológicos, será necesaria una intervención educativa especializada para conseguir la adquisición de las habilidades para producir los sonidos del habla de forma completa. Hay casos, como los del frenillo lingual que se necesita de una intervención quirúrgica.

DISFEMIA O TARTAMUDEZ

¿Qué es la disfemia? La disfemia es un trastorno de la fluidez y estructuración temporal del habla que no es apropiada para la edad de la persona.
El tartamudeo se caracteriza por repeticiones frecuentes o prolongaciones de sonidos o sílabas, así como otras alteraciones en la fluidez del habla tales como pausas dentro de una palabra, bloqueo silencioso o sonoro, sustitución de ciertas palabras por otras que se evitan, interjecciones, excesiva tensión física al pronunciar determinadas palabras y repeticiones de monosílabos.

DISARTRIA

¿Qué es la disartria? La disartria es una condición que se produce en el habla distorsionada. La causa es la dificultad para controlar o coordinar los músculos que usted usa cuando se habla, o la debilidad de los músculos. La disartria menudo se caracteriza por dificultad para hablar o lento que puede ser difícil de entender.

TEL O DISFASIA

¿Qué es la disfasia? La disfasia es la pérdida parcial del habla debida a una lesión cortical en las áreas específicas del lenguaje.
Este déficit en el lenguaje oral se caracteriza, además de por un retraso cronológico en la adquisición del lenguaje, por importantes dificultades específicas para la estructuración del mismo, produciéndose así, conductas verbales anómalas que se traducen en una desviación respecto a los procesos normales de adquisición y desarrollo del lenguaje.
Resulta difícil establecer la frontera entre retraso del lenguaje y disfasia, muchas veces el diagnóstico viene determinado por la falta de evolución ante la intervención y el nivel de la gravedad de la sintomatología. Los trastornos disfásicos tienen peor evolución con una intervención sistemática. Nosotros tomaremos como criterios de distinción, la mayor gravedad de los indicadores y la persistencia de esa gravedad. En el retraso del lenguaje, aunque en un momento determinado pudiera constatarse como de la misma gravedad que una disfasia, encontraríamos una mejor evolución, como consecuencia, no solo de la intervención, sino también porque los factores ambientales dificultadores asociados, van perdiendo fuerza frente a esa buena intervención y orientación escolar y familiar.

AFASIA

 ¿Qué es una afasia? La afasia es la incapacidad parcial o total para usar el lenguaje. Los problemas varían desde dificultades para encontrar las palabras hasta una completa incapacidad para hablar. Algunas personas tienen problemas en comprender lo que dicen los demás, otras presentan problemas al leer, escribir o al tener que operar con números.
En otros casos, las personas pueden tener problemas al querer expresar lo que quieren comunicar, aunque conservan intacta la comprensión. En la afasia se debe determinar en cada paciente las alteraciones específicas del habla y del lenguaje.
Por “habla” se entiende la ejecución de una serie de habilidades adquiridas para lograr una adecuada comunicación en la que participan los sistemas vocal, auditivo, visual y motriz. Estas habilidades incluyen: la discriminación de fonemas y palabras, la articulación, entonación y la prosodia en el lenguaje hablado; la utilización de marcas gráficas y de patrones visuales para elaborar o entender el lenguaje de signos, impreso o escrito. Las deficiencias en estas habilidades impiden la comunicación interpersonal, independientemente de cualquier trastorno del lenguaje.